Las crestas que domina el mistral

Información

Dificultad
Baja
Distancia
5.00 km
Desnivel
240 m
Duración
1 h 45 min
Ciclabilidad
0 %

Este itinerario ha sido patrocinado por el alojamiento rural Cal Porxo de Pradell de la Teixeta

De Pradell de la Teixeta a lo alto de la sierra por los Abeuredors y regreso por el barranco de la Coma Tornera

Sugerencias: Se trata de una excursión corta, apta para hacer con niños a los que les guste caminar. Pradell cuenta con un extenso y valioso patrimonio de piedra seca y un itinerario especialmente pensado para conocerlo. En verano es mejor evitar las horas más fuertes de sol.

Dicen que los olivos necesitan el mismo tipo de verano cálido que precisa el arroz para que el fruto pueda madurar. En Pradell no hay campos de arroz, pero sí aceitunas arbequinas de las cuales se extrae un delicado aceite. Muchos olivos se encuentran cerca del pueblo, como si les gustara la compañía de los que los peinan cada invierno. De esta manera los olivos quedan resguardados de las fuertes rachas de viento que bajan del noroeste y que los inviernos fríos pueden morder con fuerza. En lo alto de la sierra quedan las crestas, la roca desnuda, los pinos valientes, los panoramas generosos sobre la llanura, sobre el bello Mediterráneo, y los pastos que tradicionalmente han aprovechado los rebaños de ovejas y cabras.

El punto de partida de la excursión se encuentra en la parte baja del pueblo, en la calle Barranquet, donde se halla la pista cimentada que hay que tomar (a mano izquierda se deja una rampa) (1). Al salir del pueblo se abre un espectacular panorama sobre el valle repleto de olivos y almendros. Se abandona un camino empedrado a la derecha (2), así como una pista que se desvía en la misma dirección unos metros más allá (3), y se continúa recto, dirección este.

Se llega a un cruce y se sigue por el camino de la derecha (4). El de enfrente es el camino de regreso. Se continúa por el antiguo camino que sube hacia la sierra, en dirección als Abeuradors, salvando sabia y suavemente el desnivel. A medida que el camino gana altura, se hace evidente el pasado agrario de estas montañas; numerosos muros de piedra seca dan fe de las antiguas terrazas, ahora reconquistadas por el bosque.

La última parte de la subida combina tramos más empinados con otros de moderados (5). En lo alto de la sierra se mezclan la destacada presencia de los molinos de la central eólica con la impresionante panorámica que ofrece el paisaje. En el cruce, se gira a la izquierda, dirección al coll (collado) de la Teixeta. Unos metros de pronunciada pero cómoda bajada desembocan en una singular e imponente pared de piedra que se alza a la derecha del camino.

El recorrido sigue por la loma hasta la siguiente intersección (6), desde la que se toma el camino que desciende a la izquierda para regresar a Pradell de la Teixeta. Se baja dócilmente y paralelo al barranco de la Coma Tornera siguiendo el viejo camino, que en algunos tramos aún conserva su antiguo empedrado, hasta cerrar el círculo (4) y regresar al pueblo por la pista.