ALBARCA
Albarca era lugar de paso del camino real de Reus a Lérida y Fraga, una ruta importante de transporte de mercaderías que comunicaba las poblaciones de la costa con las tierras del interior. Antes de la construcción de la carretera actual, el camino de mulas pasaba por el lugar llamado "els hostalets", justo al pie del Montsant, donde había una herrería y hostales donde se podían alojar los trajineros. Hoy solo faltan las ruinas de dos grupos de edificaciones.
Fue municipio independiente hasta medio siglo XIX. Después de la guerra de 1936-1939, la villa sufrió un rápido proceso de despoblamiento.
Además del paisaje espectacular y de ser un buen lugar de partida de excursiones hacia la sierra de Montsant, se encuentra la iglesia de Sant Vicent, uno de los pocos ejemplos que se conservan de la arquitectura románica. Documentada en 1152, fue modificada en el siglo XVII. De la primitiva estructura conserva la parte del ábside. La portalada es de estilo renacentista.